Según publica Diario Sur, la Policía Local lo detuvo acusado de un delito contra la seguridad vial y lesiones, ya que un motorista resultó herido en el siniestro
Agentes de la Policía Local de Málaga han detenido a un hombre de 58 años que se habría dado a la fuga tras un accidente de tráfico en el que resultó herido un motorista. Cuando lo interceptaron, resultó que el conductor tenía el brazo derecho incapacitado y, además, habría consumido sustancias estupefacientes: dio positivo en tres drogas distintas.
Los hechos sucedieron la tarde del pasado 5 de agosto en la avenida Nuestra Señora de los Clarines, en la barriada de Miraflores de los Ángeles de la capital malagueña. El conductor de un turismo habría efectuado un giro prohibido y le cortó el paso a un motorista, que cayó al suelo como consecuencia de la maniobra.
Testigos del accidente alertaron inmediatamente a la sala del 092 de la Policía Local e informaron de que el conductor del automóvil se había dado a la fuga, huyendo en dirección a Monte Pavero. El aviso se difundió por radio a todas las patrullas de servicio, que coordinaron una batida por la zona, centrándose en el todo el entorno de la barriada.
Descripción del conductor
Tras recorrer las principales calles, una unidad localizó un vehículo que encajaba con la descripción facilitada por los testigos y que, según las fuentes consultadas, presentaba algunos daños compatibles con el siniestro.
Los investigadores del Grupo de Atestados (GIAAT) de la Policía Local centraron las pesquisas en identificar a la persona que acababa de estacionar ese coche. Así fue como llegaron al sospechoso, que fue localizado y detenido poco después, según las fuentes consultadas.
Los agentes pudieron comprobar que el arrestado tenía el brazo derecho incapacitado, lo que le obliga a realizar todas las maniobras de la conducción, incluido el cambio de marcha (no era un coche automático ni estaba adaptado), con la mano izquierda.
El hombre, de nacionalidad española, se sometió a la prueba de alcoholemia y al DrugTest para comprobar si había consumido algún tipo de sustancia que pudiera afectarle a la conducción. Según las fuentes consultadas, en la primera prueba dio positivo en cuatro estupefacientes, aunque posteriormente, en la analítica de confirmación, se quedó en tres.
Los agentes le leyeron los derechos por un presunto delito contra la seguridad vial y también por lesiones por imprudencia, ya que el motorista sufrió fracturas en la pierna y el brazo derechos que precisaron de intervención quirúrgica.