El individuo supuestamente habría amenazado a otro viajero que acababa de subir al autocar a modo de rehén, y huyó sin que haya sido aún detenido.
Los viajeros de la línea 79 se dirigían a San Pedro Alcántara desde Estepona casi a media noche cuando sufrieron un intento de atraco de película. Un encapuchado asaltó el autobús, amenazó al conductor y lo apuntó con una pistola mientras les pedía que le diese el dinero de la caja, según cuenta María José Díaz Alcalá en Málaga Hoy.
Los hechos ocurrieron sobre las 23:40 de este miércoles, en la A-7, todavía en el término municipal de Estepona. Cuando el conductor detuvo el autocar en Parque Antena, nada hacía presagiar que se montaría un individuo con una capucha y la cara medio tapada, para evitar ser reconocido, y le pediría todo el dinero.
Esa parada, está situada a pocos metros de la de Cancelada, cuenta una de las pasajeras que iba en el autobús, está muy oscura, alejada de comercios y viviendas y tampoco hay cámaras de seguridad cercanas. Cuando se estaban acercando, relata que divisó a un viajero vestido de rojo en la marquesina, que segundos más tarde se subió en el autobús. A lo lejos, otro hombre corría para no perder el transporte o eso pensó en un primer momento. «Yo lo vi y creía que era un pasajero más que llegaba tarde», manifiesta.
Pero, tan solo poner un pie en el autobús, el sospechoso cogió por detrás al viajero recién montado en el vehículo -que aún se encontraba en la entrada, de pie- a modo de rehén, indica la pasajera, que se encontraba sentada en el primer asiento ya que está embarazada. Con una pistola, que aún no se ha podido determinar si era real o ficticia, se dirigió hacia el conductor al grito de: «¡Dame el dinero!», recuerda.
Sin embargo, el chófer, siempre según la versión de esta viajera, en ningún momento cedió a sus amenazas, por lo que el presunto delincuente trató él mismo de coger el dinero de la caja, a lo que el conductor también opuso resistencia. En ese momento, y ante la dificultad para conseguir su fin, el individuo abandonó el autobús y huyó cruzando la autovía.
Aunque la pasajera sentada en primera fila confiesa quedarse «en shock», relata que en un momento consiguió darse la vuelta para observar al resto de ciudadanos que viajaban en el vehículo y los vio a todos en «en el suelo, con las manos en la cabeza protegiéndose y en absoluto silencio».
Tras los hechos y pese al susto, uno de los testigos consiguió coger su teléfono y llamar al servicio de Emergencias 112 Andalucía para alertar de lo ocurrido. En su llamada, aseguró que nadie había resultado herido, han informado a este periódico desde el centro coordinador.
De inmediato, se activó a la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación para tratar de esclarecer lo acaecido. Por el momento, no se han producido detenciones.
