Entre olivos y campos de cultivos, como si quisiera pasar desapercibido, emerge Cañete de las Torres, un pueblo cordobés limítrofe con la provincia de Jaén. Su casco urbano esconde un patrimonio de enorme valor histórico. Pero en los últimos años la localidad se ha dado a conocer gracias a un innovador elemento de su cementerio: unas escaleras que conducen al cielo.
Cañete de las Torres se encuentra situado en la comarca del Alto Guadalquivir, a 49 kilómetros al este de Córdoba capital. El municipio es atravesado de norte a sur por el Arroyo del Cañetejo, un afluente del Río Guadalquivir.
Desde tiempos primitivos la región ha sido testigo del paso de las distintas civilizaciones que se asentaron en la Península Ibérica. Se cree que la actual población surgió sobre un asentamiento romano, aunque es en la época musulmana cuando aparecen las mayores evidencias documentales.
El núcleo urbano es el típico de los pueblos de la campiña cordobesa, con casas blancas agrupadas en calles estrechas y sinuosas. Su economía se sustenta en el cultivo del olivar, trigo, algodón, girasol y garbanzos, aunque el sector secundario ha ido ganando peso en los últimos años.
Totalmente integrado en la arquitectura de la Plaza de España nos encontramos el Castillo medieval y la Torre del Homenaje de Cañete de las Torres. Fue construido en la primera mitad del siglo XIV sobre una fortaleza musulmana, edificada a su vez sobre una construcción romana. Es un monumento declarado Bien de Interés Cultural.
Durante las obras de rehabilitación de 2010 se hallaron pasadizos subterráneos antiguos, con galerías intercomunicadas en varias direcciones que superaban el espacio que ocupa el castillo y se adentraban hasta la plaza y otras casas construidas alrededor de la fortaleza.
El interior de la Torre del Homenaje acoge al Museo Etnográfico Rocío Caracuel Moyano, donde se expone una colección de más de 650 objetos como mobiliario, instrumentos, antiguas fotografías y otros enseres donados por los vecinos. La parte más alta de la torre cumple la función de mirador.
Junto a la Plaza de España aparece otro espacio museístico: el Museo Arqueológico Municipal. Muestra más de 1.500 piezas arqueológicas de diferentes períodos de tiempo procedentes de Cañete de las Torres y de la comarca del Alto Guadalquivir.
Muy cerca está la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción. Fue mandada a construir por el obispo Fernando de Mesa en 1260, aunque su aspecto actual es consecuencia de una reforma realizada durante el siglo XVII.
La Ermita de Nuestro Padre Jesús Nazareno es otro de los lugares de culto de la localidad.
Se trata de un templo de una sola nave, con una sencilla portada de piedra y un discreto campanario.
Fue levantada en el siglo XVI.
Oculto entre los callejones del casco urbano emerge La Tercia, un monumento histórico del siglo XVII realizado en ladrillo cuya función era reunir los diezmos eclesiásticos y otras rentas de la Corona. En su interior hay un gran patio central.
En el sur del municipio se halla la Ermita de Madre de Dios, que alberga a María Santísima del Campo, la patrona de Cañete de las Torres. Se construyó en el siglo XIII con motivo de su aparición, aunque el templo actual pertenece al siglo XVI.
Uno de los mayores reclamos turísticos de los últimos años es el Barrio del Huerto del Francés, situado en el este del pueblo. El barrio fue transformado en 2015, plagándolo de macetas decorativas y adoptando las fachadas su característico blanco y azul actual. La zona se ha convertido en un auténtico patio cordobés, al estilo de los existentes en la capital cordobesa.
Fuera del casco urbano se encuentra el Cementerio Municipal de San Rafael. Dentro del camposanto se ubica un monumento único: la Escalera al Cielo. Fue creado en 2014 como espacio para la paz, el descanso y la reflexión. La escultura rápidamente ganó popularidad, siendo elegido en 2019 el mejor monumento funerario de España.
La Escalera al Cielo constituye un nexo de unión entre “vivos” y “muertos”, interpretándose como una subida hacia lo celestial o una bajada hacia lo terrenal. El monumento también ha servido como punto de reunión para los amantes de la fotografía por los espectaculares efectos ópticos que produce.
Finalizamos nuestro paseo por Cañete de las Torres informándoles de una curiosa festividad. Cada primer fin de semana de mayo se celebra el Festival de las Flores “Calles en flor”, que cuenta con la implicación de todos los agentes de la localidad para la realización de exposiciones e intervenciones florales en determinadas zonas del municipio.
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