El bienestar de un empleado es responsabilidad de él mismo, que debe cumplir con las condiciones mínimas de seguridad y prevención, así como de la empresa, que debe proporcionar lo que esté en su mano para cumplir con ellas. No se trata solo de un compromiso legal y ético, sino de efectividad.
Para mejorar el rendimiento laboral, algo que toda empresa persigue, hace falta dejar claro a los trabajadores cuáles son sus funciones, que procedimientos deben seguir en su desempeño y cuáles son sus objetivos, para empezar. Habría que garantizar también un buen ambiente, y ello implica intentar que los trabajadores ocupan puestos según sus habilidades, además de buscar su comodidad física y mental.
Reparemos con algo tan básico como las sillas. Ofiprix, líder en muebles de oficina, puede dar bastantes ideas sobre cómo deben ser, precisamente, los muebles de oficina. El catálogo de Ofiprix en la web ya ofrece bastantes pistas, y hay que considerar que las lesiones lumbares suponen el problema de salud que más coste supone para los trabajadores.
Cómo elegir las sillas de oficina
Las sillas de oficina no son una cuestión menor cuando, aun pasando desapercibidas en muchas ocasiones, forman parte de las herramientas fundamentales de un trabajador. Igual que su ordenador debe funcionar a la perfección, la silla debe prevenir episodios tan contraproducentes, como la fatiga y el cansancio.
Ergonomía ante todo
Una máquina, mueble o utensilio ergonómico es aquel que se adapta bien a la morfología al cuerpo humano.
Las sillas de oficina de Ofiprix quieren identificarse con el concepto de sillas ergonómicas para oficina. De hecho, en su catálogo de sillas de oficina, dedican un apartado especial a las ergonómicas, junto a las giratorias, bancas o sillas tipo confidente, aunque también posean tales atributos.
De lo que se trata es de que ayuden a mantener una posición correcta de la espalda en el puesto de trabajo, así que consta de mecanismos y regulaciones suficientes para conseguirlo. Eso ayuda a prevenir lesiones de todo tipo, además de maximizar la eficiencia. Ofiprix asegura, de hecho, que sus sillas están recomendadas por los mejores doctores y especialistas, y dirigidas especialmente a quienes pasan largas horas de su jornada laboral sentados.
El importante concepto de ergonomía, de hecho, no solo es aplicable a las sillas, sino a todo aquello que el trabajador tenga que utilizar en su puesto. Ofiprix ofrece en su blog cinco ejemplos que ayudan a entender el término, empezando por cómo hay que sentarse correctamente, cómo hacer un uso adecuado de pantallas y monitores, cuál es la forma idónea del ratón y cómo se debe usar, así como unas pautas de estiramiento útiles.
Las partes suman al todo
Entender que todo influye, incluso lo que no lo parezca, ayuda a la hora de tomar decisiones para equipar la oficina en una tienda de muebles en Sevilla. Claro que no debe ser una tienda de muebles en Sevilla cualquiera, sino más bien una tienda de muebles en Andalucía que esté debidamente especializada.
Parte importante a considerar: el asiento. Este debe contar con un regulador de altura para poder fijar adecuadamente la posición del cuerpo respecto a la mesa de trabajo. Que quede demasiado alta se notará en la zona lumbar, y si queda muy alta serán vértebras y músculos de la espalda los que sufran. El abdomen tampoco debe quedar muy comprimido entre la silla y la mesa.
Otra parte importante, claro, es el respaldo, que también debe ajustarse a la espalda, siendo un apoyo para la zona lumbar. Por lo tanto, mejor si su inclinación se puede regular manualmente.
En cuanto al apoyabrazos, lo ideal es que también favorezcan la comodidad de la postura, siendo lo correcto que permitan apoyar los brazos de manera que formen un ángulo de 90 grados. Y es que, aunque la mayor parte del antebrazo se colocará sobre la mesa, los codos deben poder colocarse sobre ellos.
No solo los elementos anteriores son importantes a la hora de conformar la silla de oficina perfecta. La misma base de la silla también lo es, puesto que debe facilitar la movilidad (el desplazamiento) y su apoyo. Lo mejor es que tenga cinco ruedas, y que estas se puedan adaptar bien a la dureza del superficie sobre la que se van a mover. No es lo mismo, por ejemplo, moqueta que parqué.
El tapizado, por su parte, debe estar hecho de un tejido transpirable, teniendo en cuenta que se trata de algo de uso continuado. El conjunto perfecto se completaría, por otra parte, con un reposapiés, que facilite aún más la adopción de la postura correcta. Para ello, deberá estar hecho con materiales antideslizantes, para que quede bien fijado al suelo y no haga resbalar los pies en su superficie.
Un mínimo de movilidad
El blog de Ofiprix es más que un blog sobre oficina, puesto que recoge desde consejos útiles para el día a día del trabajador hasta recomendaciones para emprendedores. El Blog Ofiprix tiene vocación, por lo tanto, de ayudar de forma más integral.
Ofiprix recuerda que, aunque es fundamental que las sillas sean ergonómicas, es mejor no permanecer todo el tiempo sentados. Eso contribuye al sedentarismo y, a la larga, a enfermedades como la obesidad o la diabetes, apuntan.
Es recomendable hacer ejercicios y estiramientos, con el objetivo de ofrecer un mínimo de actividad a las extremidades inferiores. Se pueden hacer durante las pausas o en la misma silla, y son tan sencillos como colocar una botella de plástico entre las rodillas y hacer fuerza con las piernas para trabajar así los abductores.
La pausa también es necesaria, y lo más conveniente para aprovechar esos 5 o 10 minutos de respiro es dar un pequeño paseo, aunque sea hasta la cafetería, y charlar con algún compañero para desconectar. Lo de pasear, de hecho, no es cuestión menor: un estudio de la Universidad de Columbia recomienda moverse cada media hora, aunque sea poco. Si no, la posibilidad de sufrir alguna enfermedad mortal se multiplica por cinco.
Si con todo la espalda se resiente, habrá que ponerse en manos de un fisioterapueta o quiropráctico, que trate el dolor y ayude a corregir lo que provoca las molestias.
