¿Héroe o Villano?, la dimisión del alcalde de Cómpeta deja dudas sobre las razones reales

José Luis Torres deja atrás unos excelentes resultados pero también dimisiones y críticas por su soledad y ambición política

La sorpresiva dimisión anunciada para este viernes del alcalde de Cómpeta, José Luis Torres, independiente en las filas del PP, deja muchas dudas sobre las verdaderas razones que le han llevado a tomar esta decisión.
Aunque oficialmente ha esgrimido razones de salud motivas por sus numerosas horas de trabajo dedicadas a la Alcaldía, lo cual pocos dudan, también la soledad y el aislamiento con la que ha dirigido el consistorio y sus anhelos de progresar en política desde el mismo instante en el que decidió dejar de ser párroco, le han  motivado dimisiones y enfrentamientos que han dado más de un quebradero de cabeza en la dirección provincial del PP.
Precisamente, en otro mes de abril, pero de hace dos años dimitiá el que entonces era primer teniente de alcalde del municipio, José Aurelio  Fernández, toda una institución del PP en Cómpeta. Era ya la segunda dimisión que se producía en las filas populares.
Soledad
Aunque Aurelio Fernández, esgrimió públicamente motivos personales, a los más cercanos explicó que José Luis Torres no contaba con el resto del equipo y había hecho de la Alcaldía su reino de taifas en el que todo, absolutamente todo, tenía que pasar por él.
Baste como dato decir que, a pesar de contar con ocho concejales de once que componen la corporación, además de la Alcaldía dirigía directamente las áreas de Personal, Urbanismo, Ordenación del Territorio, Vivienda, Seguridad Ciudadana, Policía Local y Protección Civil.
Fue el portavoz del PSOE, Raúl Martín, el que en su día dio públicamente otra versión de los hechos: "La dimisión de Aurelio obedece a la muestra de la soledad y falta de apoyo del actual alcalde, con discrepancias internas insalvables y, por tanto, incapacitado para afrontar con determinación los problemas que tienen los competeños", dijo entonces en La Opinión de Málaga.
Este aislamiento queda patente hasta en la propia carta de despedida de Torres, en la que no sólo no menciona para nada a sus compañeros del gobierno, sino que únicamente habla en un tono muy personal de la gestión realizada y en la que no duda en calificarse como "uno de los mejores alcaldes de la historia de Cómpeta".
Pero lo más significativo es cuando, según el diario Sur, hace una línea entre la gestión hasta ahora y la de aquí en adelante. El rotativo dice textualmente que tras su dimisión "es tiempo de que el resto del equipo tome las riendas del Ayuntamiento", como si este resto del equipo al que hace referencia no hubiera tenido nada que ver con lo hecho hasta ahora.
Ambición
Pero el antiguo párroco de Cómpeta, también ha creado enfrentamientos en las filas populares fuera de su municipio por su anhelos de progresar en política de manera casi obsesiva.
Como presidente de la Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol Axarquía o como Diputado provincial por la comarca, Torres siempre se ha postulado en su partido para ocupar un cargo de mayor proyección que la de alcalde de Cómpeta.
Sus reiterados intentos y fracasos han llegado a hacer pensar en las filas de su principal adversario político que "con un poco de cariño se viene con nosotros", afirman alcaldes socialistas. De hecho, desde el PP se le echaba en cara que en los actos institucionales donde asistían alcaldes de uno y otro partido, se le viera mucho más cómodo en los corillos del PSOE que en los de su propio partido.
Sea como fuese, lo cierto es que el que fuera durante ocho años párroco de Cómpeta y alcalde en los últimos nueve años, desde 2007, deja unos números que ya quiseran muchos otros. Tres amplias mayorías absolutas, incluso cuando el PP pasaba por su peor momento a nivel nacional, y el  alcalde del PP más votado de toda España en 2011 con más del 70% de los votos.
Torres ocupará la plaza de cargo de confianza en la Diputación como director del Desarrollo Económico y Rural. Será sustituido por el número dos de su lista, Obdulio Pérez, también independiente, aunque para ello, el Ayuntamiento dispondrá de un plazo de 10 días a partir de  este viernes para convocar la sesión en la  que proceder a la votación del nuevo alcalde.
Su acta de concejal será ocupado por el número nueve de la lista del PP, Gwen Ferber.



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