Uno de los problemas más importantes para la población española este 2018 es sin duda la gestión de una mala salud financiera. Sanear la economía y restablecer el orden y la estabilidad ya no es ningún enigma.
Los temas económicos son uno de los quebraderos de cabeza que se sitúan en las primeras posiciones del ranking. Y más desde hace unos años atrás.
Al contrario de los que pudiera parecer, la salud financiera de una familia española, tiende a desatenderse más habitualmente de lo que debería de hacerse ya que en el peor de los casos, la dejadez de ese aspecto de la economía doméstica puede llevar a la ruina a familias enteras.
Una de las premisas que hay que grabar a fuego y mantenerla como grial es el que los ingresos sean siempre superiores a los gastos. Esta premisa debe mantenerse a lo largo del tiempo en la mayoría de hogares ya que en ella reside la clave para una buena salud económica.
Las tarjetas de crédito o los préstamos urgentes online deben mantenerse y guardarse para ocasiones especiales que lo requieran con urgencia.
Urgencias domésticas en vez de caprichos lujosos son la base para determinar si un préstamo se requiere o no
Llegar a momentos en que las personas de una determinada unidad familiar puedan requerir la solicitud de algún préstamo para hacerse cargo de los gastos mensuales básicos que sean requerimientos para el desarrollo normal de la familia mientras que gastan su sueldo base en objetos o servicios que no son de primera necesidad como puedan ser cambiarse el móvil por uno más nuevo o adquirir las últimas novedades en ropa de marca y complementos.
Conseguir minicréditos primero gratis puede ser una buena manera responsable de acabar con algunos gastos imprevistos que puedan acontecer a lo largo del año con los cuales no se contaban al inicio del mismo. Solicitar préstamos o minicréditos cuando de verdad la situación lo requiere, está señalado como un buen indicador de salud financiera y con ello una actitud responsable frente a una economía ajustada.
Solicitar préstamos que puedan conseguir una mejora a largo plazo en la vida del solicitante está determinada como una actuación propensa a desarrollar una economía saludable y de calidad.
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Préstamos sí, pero con cabeza
En estos casos más arriba señalados, la adquisición de una situación de préstamos estaría considerada como favorable y para nada sería incluida en la lista de detección de una mala salud financiera ya que los gastos antes citados producen una mejoría de la calidad de vida a largo plazo resultando una inversión fructífera y necesaria en algún momento de la vida.
Por el contrario, si se requiriera de un préstamo para conseguir un deportivo biplaza o un abrigo lujoso, nos encontraríamos claramente delante de un exceso que no implica el normal advenimiento de las funciones o necesidades familiares y que por tanto, no deben ser cubiertos con urgencia y podrían llegar a suponer un descalabro económico muy difícil de remontar para los ingresos de un hogar medio.
Con ello podríamos determinar que sostener la economía familiar con los ingresos mensuales fijos es un muy buen indicador de salud económica y de una buena gestión financiera dentro de la familia. Si además esta permite destinar una pequeña parte a la elaboración de un colchón familiar para futuros imprevistos, mejor que mejor ya que crear reservas que puedan cubrir las espaldas en un momento crítico siempre va a dotar a la familia de una sensación extra de tranquilidad que no se puede pagar con dinero.
