Diferentes coronas del ayuntamiento y el Vélez C.F. acompañaban al féretro, que descansará cerca de su querido Antonio Ferrer «Fraguas»
Enrique Atencia Portillo, fallecido en la mañana del miércoles, ya descansa en paz. Esta tarde ha recibido sepultura en el cementerio de su pueblo, Vélez-Málaga, por el que luchó en tantas facetas, sobre todo en la futbolística. Un centenar de personas se dieron cita a las 17 horas de hoy en el Tanatorio de La Esperanza para decir adiós al que fue durante 50 años un hombre que vivió para y por el Vélez Club de Fútbol. Posiblemente se ha echado en falta gente que trabajaron codo a codo con Atencia en determinados momentos, o representantes de diferentes equipos, aunque suponemos que la hora y el día era un inconveniente. El padre Abel, que no ofició la misa, pero sí quiso intervenir, con estas palabras: "Enrique será por siempre un hombre de un corazón que no le cabía en el pecho, y hombres así hacen falta en esta sociedad". Calor sofocante para acompañar los restos que ya descansan en el cementerio veleño donde por supuesto estaban sus cuatro hijos, hijos políticos y demás familiares, todos muy afectados por esta pérdida. Diferentes coronas y ramos de flores del ayuntamiento veleño o el propio Vélez acompañaban al féretro, que curiosamente descansa muy cerca de su querido Antonio Ferrer "Fraguas". Una de las personas que han estado en la tarde de hoy junto al cuerpo de Enrique Atencia y que estuvo también muy cerca de él cuando Atencia vivió de cerca su pasión por el Vélez, ha sido Pepe Ríos, ex entrenador del Vélez. Ríos ha destacado: "Se nos va parte de la historia del Vélez y puede ser la persona más importante del Vélez en los últimos 50 años. Hay que tener en cuenta que cuando no había presidente el movía lo hilos para que alguien se presentara. Estaba en contacto con el ayuntamiento, la federación, buscaba dinero, hacía rifas…Ha sido un hombre clave, y que ha vivido su pasión con una enorme ilusión y que ha sido un personaje que vamos a echar de menos".
