El delegado de hermandades presidió la solemne eucaristía con la que concluían los actos para recibir a la imagen tras su restauración.
Este sábado se cerraba un episodio trágico en la historia del mundo cofrade veleño y se abría un nuevo capítulo, con ilusión y esperanza, para la Real Cofradía de Ntro. Padre Jesús en su Triunfal Entrada en Jerusalén y Mª Stma. del Rocío. Triunfal y gloriosa volvía al culto su titular mariana, tras haber sido restaurada, dejando atrás el trágico incidente del pasado Domingo de Ramos.
Durante esta semana se iban descontando los días, a través de redes sociales, anunciando su llegada. Claveles blancos en el patio de la parroquia de San José se agolpaban en cubas que se iban reponiendo para volverse a llenar. Flores con las que el presbiterio evocaba un trono para la Reina del Domingo de Ramos.
Miradas de emoción, lágrimas contenidas y otras que brotaban de unos ojos que volvían a contemplar a la Virgen del Rocío en toda su belleza y esplendor, dejando atrás el sufrimiento y la incertidumbre de estos largos ocho meses que quedaron atrás tras abrirse las puertas del templo a las 11 de la mañana.
Fotos, fotos y más fotos, para inmortalizar este momento. La Banda Municipal de Vélez-Málaga puso la nota musical, interpretando varias marchas procesionales, entre las que no podía faltar la que el maestro Perfecto Artola dedicó «A la veleña Virgen del Rocío».
Tras la música, la palabra. Las manos Juan González Garcia, Juan Ventura como es reconocido en el mundo cofrade, tallaron a la Virgen del Rocío en 1980 y 43 años después, esas mismas manos han sido las encargadas de recuperar su policromía, tras los daños causados con el incendio que provocó prácticamente al comienzo de la procesión, una vela que se volcó prendiendo fuego a la saya, al manto y a la propia imagen. La emoción quebró en varias ocasiones la voz del imaginero sevillano durante su intervención tras la que el hermano mayor de la cofradía, Salvador Fortes, daba las gracias al pueblo 
de Vélez y a todas las hermandades y cofradías tanto del municipio como de otros puntos de Andalucía, que habían colaborado de una u otra forma con el ajuar y patrimonio de la Virgen. Al son de zambombas y panderetas la recientemente recuperada Pastoral de Santa María la Mayor de Vélez-Málaga agasajaba a la Virgen con cánticos populares de esta época.
Ya por la tarde, la Virgen se encontraba a los pies del altar efímero levantado en su honor para esta ocasión. El delegado de hermandades y cofradías de al Diócesis de Málaga, Salvador Guerrero, presidió la solemne eucaristía concelebrada con sacerdotes de diferentes parroquias del municipio y la fraternidad franciscana. El Coro de la Peña Axarquía, que acompañó la ceremonia, concluía con una emotiva plegaria que discurría desde el trágico incidente hasta su regreso y el reencuentro con sus fieles y devotos. Al concluir la misa, varios componentes de la AM Ntro Padre Jesús Nazareno de Alcaudete, la banda que acompaña a Jesús de la Pollinica el Domingo de Ramos, entregaba la portada con las primeras notas de la partitura de la marcha que le están componiendo a la Virgen.
Aún sigue por delante un largo camino para la cofradía, de cara al Domingo de Ramos de 2024, para restaurar y reemplazar el patrimonio y ajuar de la Virgen, y del trono, que se vio gravemente dañado durante las labores de protección de la imagen. Pero ya con su Madre de regreso, este camino seguro que se hará más llevadero.
