Las partes han llegado a un acuerdo de conformidad por el cual el procesado, al que se le ha aplicado una eximente incompleta por enajenación mental, no ingresará en prisión.
El hombre acusado de abusar sexualmente de un menor de edad y de crear un grupo de WhatsApp con tres menores de Vélez-Málaga para conseguir fotos íntimas, a cambio de dinero para recargar sus teléfonos móviles, ha reconocido los hechos, según informa Diario SUR.
El juicio, celebrado este martes, se ha resuelto con un acuerdo de conformidad entre todas las partes, lo que implica que el relato de la Fiscalía ha sido aceptado de forma íntegra por el acusado, de 27 años.
Esto implica que se le ha condenado por un delito de abuso sexual a un menor de edad y dos delitos de acoso a través de las telecomunicaciones a las otras dos víctimas (los tres menores tenían 16 años cuando se produjeron los hechos). Por el primero de ellos ha sido condenado a dos años de prisión, aunque el ingreso se ha suspendido a cambio de que el condenado cumpla con una serie de requisitos, entre los que se encuentra la prohibición de usar las redes sociales para contactar con menores durante cinco años.
Las condiciones para que el hombre no entre en prisión son, además, el acatamiento de una orden de alejamiento sobre las tres víctimas durante cinco años –en régimen de libertad vigilada–; asistir a un curso de reeducación sexual y pagar una indemnización a cada uno de los menores. Tendrá que abonar 6.000 euros al que sufrió los abusos sexuales, perpetrados en la parte de atrás de un centro comercial de Vélez-Málaga, donde le realizó tocamientos en contra de su voluntad. A los otros dos deberá indemnizarlos con 1.500 euros. Además, los dos delitos de acoso conllevan una multa económica de unos mil euros.
La conformidad del ahora condenado da por válido el relato de la Fiscalía, que en su petición de condena solicitaba 16 años de prisión. El hombre llegó a crear un grupo de WhatsApp para comunicarse con sus tres víctimas y a través de ese medio les ofrecía dinero para sus teléfonos móviles a cambio de contenido sexual. Uno de ellos llegó a enviarle una imagen de unos genitales masculinos por los que recibió diez euros.
En este grupo les proponía mantener relaciones sexuales en conversaciones que se fueron prolongando durante un tiempo, con las que consiguió concertar el encuentro con el menor del que luego abusó sexualmente. En el acuerdo se ha aplicado una eximente incompleta por enajenación mental, ya que el procesado padece una minusvalía psíquica.
