También han asaltado las instalaciones de la Presidencia y del Tribunal Supremo.
Una multitud de seguidores del expresidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha invadido la sede del Congreso, de la Presidencia y del Tribunal Supremo, en Brasilia, exigiendo una intervención militar para echar a Luiz Inácio Lula da Silva del poder, que tomó posesión el 1 de enero. La policía recuperó el control del Tribunal Supremo sobre las 17.00 (hora local), sin embargo, los manifestantes seguían en el Congreso y en el Palacio de Planalto, la sede de la Presidencia.
Según informaciones recogidas en varios medios nacionales, el grupo de bolsonaristas superó la barrera policial que protegía el Congreso y algunos de los manifestantes han conseguido acceder a su interior. Los extremistas, en su mayoría con camisetas amarillas y verdes y banderas de Brasil, también atacaron algunos vehículos de la Policía Legislativa, que brinda seguridad al Congreso, enfrentándose a los agentes con palos.