Los locales realizaron un partido muy serio y contundente que anuló cualquier posibilidad para los de Magnus Pehrsson.
El Vélez cae contra el Racing Cartagena Mar Menor en un domingo negro. Con esta derrota se sitúa en mitad de tabla, por debajo de el último rival, con 18 puntos, a tres de la zona del descenso y dos de la zona del Playoff de ascenso.
No fue el día para el equipo veleño, y sí para su rival, el Racing Cartagena Mar Menor, plantilla que había anotado siete goles en toda la temporada. Ante el Vélez marcó tres, en un partido muy serio de los locales y muy pobre de los visitantes.
El Vélez no comenzó el partido del todo mal, pero un gol inesperado en propia puerta, en una jugada sin peligro, le cambió el guión del partido completamente. Aunque, justamente después del gol, el Racing Cartagena pasó un mal momento, en dar amplitud, robar, mantener jugadas largas…
En la segunda mitad, Gastón tuvo una oportunidad de oro para igualar el marcador. El Racing Cartagena siguió serio, con una buena defensa y bien con la pelota. Con un contraataque llegó el 2-0 que rompió completamente el partido. Raúl Robles fue el encargado de finiquitar la jugada. Desde ese momento, al Vélez se le apagó la luz. A partir del gol, el equipo dirigido por Magnus Pehrsson perdió verticalidad, posesión y rapidez con el balón. A falta de 20 minutos, llegó el tercero y último tanto a través de Montejo.
El Racing Cartagena se plantó de primera hora muy serio en el campo, así se mantuvo. Aprovechó las oportunidades, ante una defensa poco contundente del Vélez. Con su efectividad logró desmoralizar al equipo visitante, que lo intentaba, pero en cuanto daban un paso hacia adelante, los locales respondían con otro gol.