Exceptuando las pinturas del Cerro de los Remedios y algún cuadro en su juventud, Guerra nunca se había atrevido a pintar a personas.
A sus 78 años, el pintor Evaristo Guerra intenta mantener la rutina laboral a pesar de las circunstacias. Según informa SUR, a diario acude a su estudio de Torre del Mar, donde continúa dando rienda suelta a su imaginación de la mano de su paleta de colores.
No obstante, confiesa «como cualquiera, en estos meses de pandemia del coronavirus tengo miedo e incertidumbre». Casi por primera vez en su trayectoria, a excepción de la ‘ermita transparente’ del Cerro de los Remedios, donde está la patrona de Vélez-Málaga, y algún que otro cuadro de juventud, Guerra se ha animado a pintar a personas, y ha decidido hacerlo con sus seres más queridos.
El cuadro, de gran formato (mide 1,94 metros de alto por 1,16 de ancho), está, de momento dibujado a carboncillo, una técnica que el maestro veleño domina a la perfección. Sentada en la butaca en la que suele hacerlo cada vez que está con él en su estudio, aparece su mujer, María Adela Pareja. A su derecha está la mediana de sus tres hijos, Lola, de 48 años. De pie aparecen, de izquierda a derecha, el propio Evaristo, su primogénito, Evaristo Jesús, de 51 años, y artista también de profesión, y el menor de los tres hijos, Antonio Francisco, de 45 años.
«A mis cinco nietos, Lola, Blanca, Alberto, Álvaro y Candela, que tienen entre 16 y 10 años, no los he pintado también porque si no ya iba a estar muy recargado el cuadro», bromea Guerra con su habitual sorna en declaraciones a Diario SUR. Cuando se le pregunta qué le ha movido a salirse de su estilo habitual de paisajes de la Axarquía, el pintor traga saliva y apunta: «Tengo miedo de contagiarme del Covid-19 y morirme, fue durante el confinamiento, estaba aquí un día mi mujer y empecé a dibujarla sentada en la butaca en la que siempre se pone», relata. A partir de ahí la composición fue ganando en tamaño y protagonistas hasta convertirse en un gran retrato familiar, al que el artista pretende empezar a darle color en las próximas semanas.
IMAGEN: Diario SUR
