Ignacio Luis Herrera Conde, a sus 18 años, es el creador de la identidad corporativa para esta especialidad universitaria en Málaga que no tenía imagen propia.
El joven veleño Ignacio Luis Herrera Conde ha sido el ganador del concurso de ideas convocado por la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Málaga, para el diseño del logotipo destinado a ser la identidad visual corporativa de la Facultad.
El premio, dotado con 500 euros, se entregó este martes en un acto enmarcado en la Semana Cultural que se ha celebrado en el centro con motivo de la festividad de su patrón, San Juan de Dios. El Centro, cuyo nacimiento data del curso 1972/73, se integra en la Universidad en el curso académico 1990/91, creándose la Escuela Universitaria de Enfermería y Fisioterapia de Málaga, denominándose más tarde Escuela Universitaria de Ciencias de la Salud y Programa de Doctorado. Pese a su antigüedad, no contaba con una identidad corporativa propia.
«Preséntate a todos los concursos que te servirán para aprender», le dijeron sus profesores tras culminar sus estudios de Bachillerato de Arte en el IES Reyes Católicos de Vélez-Málaga, en el que su madre, Cristina Conde, es actualmente directora. Y así lo hizo. El primero al que se presenta, que tuvo conocimiento de ello casi por casualidad, ya que algunos amigos de él están estudiando en esa Facultad. Y gana.
Por la memoria que acompañaba a su proyecto de manera completamente anónima, tal y como requerían las bases, el jurado se sorprendió al descubrir en el momento de la entrega del premio su juventud, 18 años, ya que por el desarrollo del mismo daban por hecho de que se trataría de una persona con más edad y experiencia, le comentaba su madre a nuestra compañera Vanesa Fernández durante su entrevista telefónica, señalando que podía apreciarse el entusiasmo y satisfacción al explicarlo, y la verdad es que motivos no le faltan.
El diseño aúna dos elementos claves: la letra «S», de Salud, aglutinando en ella a los cuatro grados de la Faculdad. En ella simboliza además una serpiente sinuosa, de forma minimalista, que representa la vara de Asclepio, símbolo univsersal de la salud. Por otro lado, medio corazón que se completa al fundirse con la «S», Herrera indicaba que ha querido formar este corazón porque para él «representa el motor de la vida, el eje vertebrador del estado de bienestar físico, mental y social».
El artista, ¿nace o se hace? Está claro que si las dos circunstancias confluyen, el trabajo no quedará sin recompensa. Vivir en un entorno familiar artístico seguro que ha servido para motivarle y apoyarle a la hora de formarse, pero su tesón en los estudios ha sido un esfuerzo personal. Sobrino del gran artista veleño Pepe Luis Conde, que llevó el nombre de Vélez-Málaga por bandera al corazón de Europa, en Suiza especialmente, y por toda Sudamérica, donde sus girar se prolongaron durante décadas. Y nieto de Mari Carmen Fernández Rivera, poetisa y pintora artística que abrió durante años su residencia, La Casa de la Pintora, en el barrio de la Villa, para acercar el arte tanto a los escolares como a tantas visitas que durante años han podido aprender con las tertulias que siempre acompañaba.
Ignacio Herrera tenía claro que el arte sería su futuro, siempre ha sido muy creativo, y no sabía si decantarse por centrar su estudios en Bellas Artes o Diseño Gráfico. Para las Enseñanzas de Artes Plásticas y Diseño además de las calificaciones obtenidas en la conocida Selectividad, es necesario una prueba específica, que el pasado verano se celebró en Sevilla. Gracias a la puntuación obtenida pudo matricularse en la Escuela de Arte de San Telmo en Málaga, donde se encuentra cursando el primer curso de Grado Universitario de Diseño Gráfico.
