El equino presentaba deformaciones en los cascos, por lo que actuó APISMAN que ha trasladado al poni a Alhaurín de la Torre.
La Asociación APISMAN, con la colaboración del SEPRONA de Vélez-Málaga y el Centro Andalusí de Rescate de Caballos de Alhaurín de la Torre, han conseguido liberar a un poni que se encontraba en malas condiciones en una finca ubicada en Daimalos (Arenas). El equino presentaba los cascos de las patas delanteras deformados, situación que le provocaba un dolor intenso y constante.
Óscar del Bosque, presidente de APISMAM, ha explicado a este diario que detectaron este suceso hace dos meses, en una de las inspecciones rutinarias que realiza la asociación por las explotaciones. Al ver en la situación en la que se encontraba el animal, hicieron un seguimiento del caso por Arenas y Daimalos hasta dar con el dueño o supuesto propietario del poni.
Según del Bosque, el animal no tenía chip ni había recibido control veterinario. APISMAN decidió ponerse en contacto con el Centro Andalusí de Rescate de Caballos de Alhaurín de la Torre. Les hizo llegar, justo una semana antes de Semana Santa, fotos y vídeos de la explotación donde se encontraba el poni junto a otros equinos. En pocos días, se montó un dispositivo gracias a ambas asociaciones y al SEPRONA de Vélez-Málaga para liberar al animal, que ha sido trasladado a Alhaurín de la Torre, donde se recupera favorablemente.
Cuenta Del Bosque que tuvieron que llamar a un veterinario especialista en traumatología de Córdoba para tratar al equino que debido a la deformidad de los cascos, tenía dañados los tendones de las patas traseras. El dueño pretendía cortarle los cascos con una radial.
