La adjudicataria de los trabajos, con más de 4.000 millones de deudas, ha solicitado el preconcurso de acreedores.
Gran inquietud en el Ayuntamiento y el sector empresarial de Nerja tras conocerse que la empresa adjudicataria de los trabajos de construcción de la EDAR, Isolux-Corsán-Corviam, solicitó ayer el preconcurso de acreedores al contabilizar deudas de más de 4.000 millones de euros.
El temor a que esta situación suponga una nueva paralización de los trabajos, que se reiniciaron en enero cuando deberían estar finalizados el pasado verano, se ha instalado en el municipio. La empresa solo tiene cuatro meses para renegociar la deuda o irá a la liquidación.
Según informa Diario Sur, Isolux ha tomado esta decisión después de que aún no hayan podido fructificar las negociaciones que mantiene desde finales de 2016 con sus tres principales bancos acreedores y accionistas: Santander, Bankia y CaixaBank.
Los trabajos, adjudicados en 23,4 millones de euros y que en un principio esperan estar finalizados para finales de este año, se encuentran casi al 80% de ejecución, pero, entre otras actuaciones, aún queda pendiente la principal estación de bombeo, el colector a lo largo de la avenida Antonio Ferrándis ‘Chanquete’, desde la estación de bombeo de la desembocadura del río Chíllar, hasta conectar con la calle Diputación. Además, falta por instalar el nuevo emisario submarino de Burriana y el que sustituirá al que se ha roto frente a la playa de El Chucho.
La alcaldesa, Rosa Arrabal (PSOE), dijo a SUR que ellos ya llevaban avisando desde hace meses de las dificultades económicas de la empresa, «y desde el PP me llamaban mentirosa», matizó.
La regidora anunció al periódico que van a volver a pedir una reunión con el Ministerio de Medio Ambiente para conocer de primera mano el estado del proyecto. Desde la Asociación de Empresarios de Nerja (AEN), también mostraron su «profunda preocupación» por la situación.
