El litoral del municipio cumple con los criterios exigibles por el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), puntuando la gestión, servicios y óptimas condiciones de baño.
Las playas del municipio de Rincón de la Victoria han sido reconocidas un año más con la Bandera Q que concede el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), tal y como ha informado hoy el concejal de Medio Ambiente, Sergio Díaz (PP).
Se trata del quinto año consecutivo que las playas de Rincón de la Victoria, La Cala del Moral y Torre de Benagalbón logran esta certificación que valora la gestión y oferta de servicios, limpieza de espacios públicos, además de unas condiciones de baño óptimas y unos servicios excelentes de atención al usuario. “Entre otros parámetros para su concesión se ha puntuado la gestión de las playas, la política de calidad, buenas prácticas ambientales, y analíticas de calidad del agua y la arena, entre otros”, señala Díaz.
El alcalde de Rincón de la Victoria, Francisco Salado (PP), ha explicado que “este reconocimiento pone a las playas de nuestro litoral en una posición de calidad y seguridad óptima para el disfrute y la tranquilidad de nuestros vecinos y visitantes”. Asimismo, el regidor ha destacado que “nuestro litoral presenta un equilibrio entre la calidad de los servicios, la competitividad, y sostenibilidad del sistema reconocidos por esta certificación”.
La Concejalía de Medio Ambiente ha realizado numerosas actuaciones de mejoras en las playas de Rincón de la Victoria como la instalación de 25 cambiadores de madera y seis nuevos módulos de aseos distribuidos por la franja litoral, las mejoras de los puntos de accesibilidad con la ampliación de las pasarelas de hormigón y la instalación de un nuevo aseo adaptado en Torre de Benagalbón, y según apunta el concejal, “recientemente hemos instalado duchas adaptadas en la Playa de La Cala del Moral con la finalidad de implantarlas en el resto de playas del litoral”.
Además, el litoral rinconero ha obtenido este año el sello `Safe Tourism Certified´ por la gestión de medidas de protección y autoprotección de los usuarios y trabajadores de las playas, como garantía y prevención frente a los riesgos para la salud por el COVID-19, introduciendo medidas y protocolos de actuación como la desinfección de los equipamientos de playa, la formación del personal respecto a la prevención del contagio del virus, la utilización de EPIS, la correcta gestión del aforo de la Playa y el mantenimiento de las distancias de seguridad, etc.
