El investigado, un hombre argelino de 36 años, aprovechaba el momento en el que los repartidores se hallaban cogiendo efectos del maletero o trasladándolos a un negocio cercano para introducirse en la parte delantera del coche y sustraer los objetos de valor que encontraba a su paso.
Agentes de la Policía Nacional han detenido en Málaga a un hombre, de 36 años y nacionalidad argelina, por su presunta implicación en la comisión de una decena de hurtos en vehículos de reparto, estacionados en áreas de carga y descarga de la zona centro de la capital. Según la investigación, el arrestado aprovechaba el momento en el que los repartidores se hallaban manipulando efectos del maletero o transportándolos a un negocio próximo para introducirse en la parte delantera del coche y sustraer los objetos de valor.
La investigación, que ha sido llevada a cabo por agentes de la Comisaría de Distrito Centro, se centró en identificar al presunto artífice de una decena de hurtos cometidos en vehículos de reparto en zonas de carga y descarga, en el entorno del mercado de Atarazanas y el Soho, mayoritariamente.
La primera denuncia se produjo a mediados del mes de noviembre, a raíz del hurto cometido, en calle Puerta Buenaventura, a un empleado de una empresa de reparto, a quien, según consta en diligencias, le sustrajeron, del interior del vehículo, un bolso de mano y 5.000 euros en efectivo.
A este primer caso se sumaron nuevos hechos con mismos modus operandi y lugar de actuación -zonas de carga y descarga en el Centro-, que llevaron a los investigadores a sospechar que se trataba de un mismo autor.
Así, se planificó un dispositivo tendente a la localización del sospechoso que, trajo sus frutos el día 22 de enero, cuando la Policía Nacional le sorprendía infraganti mientras perpetraba un nuevo hurto. El sospechoso se habría introducido en la cabina de una furgoneta de reparto de mercancias, aprovechando un descuido de un repartidor, para sustraerle un bolso con sus efectos personales, en calle Vendeja.
En un registro en la morada del investigado, los agentes intervinieron media docena de teléfonos móviles, un ordenador portátil, una cámara de fotos, un patinete eléctrico, varios bolsos, 1.000 euros en efectivo -y otras cantidades inferiores de dinero en distintas divisas extranjeras-, entre otros efectos. Los objetos recuperados han sido devueltos a sus legítimos propietarios.
