La cosecha está peor de lo esperado en la mayoría del territorio de la provincia, menos en municipios como Arenas, donde se espera una mayor producción.
Desde la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) de Málaga se ha valorado el aforo oficial de la campaña oleícola 2019/20. Se ha presentado una producción de aceite de oliva en Andalucía que se situará en 983.680 toneladas, de las que 59.120 toneladas de aceite serían de Málaga. Según estos datos, habrá un 31% menos de cosecha en la provincia que el año anterior, cuando las pérdidas ya fueron cuantiosas, de casi 90 millones de euros.
Tras llevar a cabo las oportunas consultas por las comarcas olivareras de la provincia malagueña, que cuenta con 137.000 hectáreas y genera 1,5 millones de jornales, la conclusión de COAG Málaga es la siguiente: “la cosecha está peor de lo que se esperaba debido a la sequía, con la excepción de algunos municipios como el de Arenas, donde se espera una mayor cosecha”, han explicado en un comunicado oficial.
Ante esta situación, desde la coordinadora de Málaga no se entiende “por qué los precios del aceite siguen bajos, cuando la cosecha va a ser escasa en Málaga y en casi en todo el territorio español”, señalaban. A estas malas previsiones se suma que la cosecha mundial también será más baja, por tanto, no habrá excedente de aceite en el mercado internacional.
Por ello, desde esta organización exigen a la industria y a la distribución que dejen de “especular a la baja con nuestro aceite, ya que les están haciendo un daño tremendo a los productores y se está comprometiendo la viabilidad del sector”, apuntaban en el comunicado.
Asimismo, instan a que “dejen de importar aceite”. En concreto, se refieren a las importaciones que, cuando llegan a España son difíciles de rastrear, generando una desconfianza en los mercados internacionales que puede afectar a todo el sector.
Para COAG Málaga, no se entiende que en Italia haya estado el aceite a 5 €/kilo casi todo el año y en España apenas haya sobrepasado los 2,30€/kilo. Por ello, exigen a las empresas exportadoras “responsabilidad a la hora de competir por las cuotas de mercado y no tiren nuestro aceite al suelo para aumentar dichas cuotas”. Según la coordinadora, “esa manera de actuar sólo sirve para banalizar el aceite de oliva y machacar a los productores españoles”.
En este sentido, hay que destacar que con la salida de miles de olivareros en las manifestaciones de Jaén, Sevilla y Madrid, se han ido consiguiendo algunas peticiones como la apertura de un laboratorio agroalimentario en la provincia de Jaén, que va a ser referencia, además de duplicarse los controles de calidad.
Sin embargo, para la organización, al mismo tiempo hay que seguir reconsiderando otras como el tráfico de perfeccionamiento activo, los contingentes de aceite que vienen de otros países, y la autorregulación del sector, así como un almacenamiento privado.
