Un ceutí de 50 años acabó en el Hospital de Alta Resolución (HARE) de Benalmádena tras encontrarse en su estómago hasta 47 bellotas de hachís. El hombre, de 50 años, acudió hasta urgencias del centro aquejado de dolores de barriga, acompañados de sudor frío y malestar general. Tras examinarle y descubrir tal cantidad de bolsas dentro de su estómago, el propio paciente les confesó que las había ingerido para transportarlo.
En esta información, publicada por el Diario SUR, se cuenta además que tras la confesión se activó automáticamente el protocolo habilitado: avisar a la Policía Nacional de lo que sucedía, la cual se encarga de custodiar al paciente. “El mismo miércoles, agentes de la Comisaría de Torremolinos-Benalmádena del Cuerpo Nacional de Policía se hicieron cargo del caso”, explica la información.
Fue entonces cuando se consideró necesario trasladar al ceutí al Hospital Clínico, donde fue operado de urgencia para retirarle la cantidad de droga ingerida del cuerpo. “Tal y como indican fuentes hospitalarias, el paciente pasó el jueves en la UCI quirúrgica, donde se recuperó de la intervención y quedó fuera de peligro. Una vez reciba el alta deberá declarar ante los agentes a cargo de la investigación”, sigue la información.
Un hecho que, como explica el cirujano César Ramírez, jefe del servicio de cirguía general y aparato digestivo del Hospital Quirónsalud Málaga al Diario SUR, podría haber supuesto incluso la muerte del hombre. Uno de los riesgos es que las bolsas, bolas, bellotas o paquetes se atasquen en el tracto digestivo, lo que puede derivar en una obstrucción mecánica que produce dolores como los expuestos por el ceutí en su visita a urgencias.
Esta práctica, denominada ‘body packer’, puede ser letal si las bolsas que se transportan en el estómago se rompen y contienen sustancias aún más peligrosas como heroína o cocaína.
