Avaló con su patrimonio el préstamo de un familiar para montar un negocio que fracasó, ahora con la ley de segunda oportunidad podrá rehacer su vida.
Una mujer acabó con serios problemas económicos al tener que solicitar varios préstamos para intentar pagar una importante deuda. El problema reside en el negocio de un familiar que fracasó en el que ella intervino avalando con su patrimonio. El hombre dejó de pagar y el peso cayó sobre la avalista que acabó generando una cantidad a pagar al banco de cerca de 250.000 euros.
Ahora, un juzgado de Fuengirola entiende que la mujer puede acogerse a la ley de segunda oportunidad, exonerando del pasivo insatisfecho al tratarse de una ‘persona natural, deudora de buena fe’ que se presentó en su día a concurso de acreedores, que acaba fallando a su favor.
Esta ley entró en vigor en 2015 y va dirigida a aquellas personas que se encuentran en una situación de bloqueo económico y financiación por causa del sobreendeudamiento. Esta legislación permite que las partes afectadas puedan pactar un nuevo acuerdo de pago con los acreedores pudiéndose llegar a la cancelación total de las deudas, según informa DiarioSur.
