El hombre, de 76 años, está ingresado en el hospital tras ser operado de una fractura de cadera, informa el Diario Málaga Hoy.
El pasado domingo, un hombre de 76 años iba por una calle de la barriada de La Luz, en Málaga capital, cuando se cruzó con un joven de 16 años al que llamó la atención por no llevar la mascarilla puesta y pasar junto a él sin guardar la distancia mínima de seguridad. Su respuesta, según ha relatado el hijo de la víctima, César Suárez, fue darle un empujón y tirarle al suelo. Como consecuencia de la caída se rompió la cadera.
César Suárez, periodista de Radio Marca, denunció lo sucedido públicamente tanto en este medio como a través de su cuenta de Twitter, donde no ocultaba su enfado por lo sucedido: «Es tan grande mi impotencia viendo a mi padre tumbado en una cama de hospital sin poder moverse y sufriendo física y anímicamente que me llevan los demonios», escribía en esta red social.
El anciano está ingresado en el hospital Clínico de Málaga y ha tenido que ser operado para ponerle una prótesis de cadera. La intervención se ha llevado a cabo este miércoles por la mañana y, según ha señalado Suárez, ha salido bien. Así, ya más tranquilo, el periodista ha explicado que todavía no saben cuándo podrá volver a casa. «Mañana (este jueves) le tienen que hacer una radiografía para ver cómo ha quedado y a partir de ahí, si todo va normal en un par de días empezará con la rehabilitación».
Según ha detallado este miércoles el periodista, el adolescente se cruzó por la misma acera con el hombre -persona de riesgo por tener problemas de bronquios- que le exigió que se pusiera la mascarilla. «Mi padre es una persona mayor, aprensivo, y se asusta; y el niño, maleducado, le respondió mal y se encaró«, aclara Suárez. Al parecer, en ese momento la víctima le volvió a recriminar «que le iba a contagiar y que se la pusiera» y fue entonces cuando «se puso todavía más chulo y le empujó». «Tuvo suerte de caer de lado, porque si cae de espaldas se hubiera golpeado en la cabeza», dice.
«Mi padre me llamó diciéndome que un hombre lo había tirado al suelo y que no se podía mover, que creía que tenía la cadera rota», explica el periodista, que apunta a que el joven tampoco le auxilió. En su declaración a la policía, el menor dijo que «se había puesto muy nervioso y que por eso había reaccionado así y lo había empujado».
Los hechos están denunciados en la Comisaría Provincial de Málaga y el autor «está identificado desde el primer momento. «Allí había testigos que llamaron a la policía», asegura, a la vez que aclara que «al haber tenido una fractura es un delito», lo que acarrea detención. Lo que lamenta, según dice, es que «el niño estará en la playa con sus amigos y mi padre en la cama de un hospital».
