El Capitán, en 2014, decidió investigar tres viviendas en suelo rústico no urbanizable. Dos de ellas eran legales, la tercera carecía de la documentación necesaria. La Fiscalía pide dos años y nueve meses de cárcel, una multa y la inhabilitación por siete años.
Un Guardia Civil es acusado por el Ministerio Público de ocultar y no tramitar un expediente urbanístico. Este acontecimiento sucedió en 2014, cuando ordenó la investigación de tres viviendas en suelo rústico no urbanizable en el municipio. Dos casas eran legales, pero la última no disponía de todos los permisos legales, según informa la Cadena Ser.
El Capitán de la Guardia Civil, en ese año, decidió no tramitar la documentación ya que el afectado era el padre de un jefe de la Policía Local del municipio.
El Ministerio Público mantiene que el acusado, capitán del puesto de la Guardia Civil de Coín en el año 2014, ordenó a un subordinado que investigara la construcción de tres viviendas en suelo rústico no urbanizable en el término municipal.
De las pesquisas el agente extrajo que dos de las viviendas eran legalizables porque estaban terminadas pero no así una tercera .
Cuando el capitán recibió el informe decidió hacerse cargo del procedimiento cuando, en realidad, lo paralizó ya que el afectado era el padre del jefe de la Policía Local de este municipio.
Después de un tiempo, tras la denuncia de un particular, el expediente salió a la luz.
La Fiscalía acusa al Guardia Civil de encubrimiento, omisión del deber y pide una condena de dos años y nueve meses de cárcel, nueve mil euros de multa e inhabilitación para ejercer en cualquier cuerpo de Seguridad de el Estado en siete años.
Este miércoles comienza el juicio en la Audiencia de Málaga.
