Juan Jesús Gallardo asegura que no puede seguir viviendo al lado de ellos, «me quieren matar».
El alcalde de Alfarnate en funciones, Juan Jesús Gallardo (PSOE), ha denunciado ante la Guardia Civil unas presuntas amenazas de muerte y un intento de agresión con armas blancas por parte de un grupo de vecinos del municipio situado en la Alta Axarquía. El regidor ha explicado a SUR que los hechos tuvieron lugar en la madrugada del sábado, después de un primer incidente ocurrido en un bar del municipio, de apenas 1.039 vecinos empadronados.
Según el testimonio del regidor, de 30 años, sobre las 00.00 horas estaba en un establecimiento hostelero junto a unos amigos, cuando un vecino empezó a fumar en el interior. «Le llamamos la atención y lo sacamos fuera, con la ayuda del propietario», ha explicado Gallardo, quien ha dicho que fue entonces cuando estos residentes empezaron a «increparlos» y a lanzarles «botellas y vasos de cristal».
«Una de las botellas golpeó al dueño del bar en la cabeza, provocándole varios cortes, empezó a sangrar mucho, y a mí me dio otra en un costado, pero no me hirió», ha apuntado el alcalde alfarnateño. Según su testimonio, fue entonces cuando se trasladaron al consultorio local para que atendieron al hostelero de las heridas. Requirió de varios puntos de sutura.
En ese momento, Gallardo recibió «una llamada» de sus padres, asegurando que los implicados en el ataque habían acudido a su domicilio para localizarlo y estaban diciendo que iban a «buscarlo para matarlo». «Salí un momento y los vi venir, iban por lo menos seis, dos de ellos con pasamontañas, llevaban palos, cuchillos, navajas y machetes», ha relatado el alcalde, quien ha asegurado que fue entonces cuando salió corriendo y se refugió en el centro sanitario.
«Si me pillan en otro sitio me hubiesen matado», ha expresado Gallardo, quien ha agradecido la rápida actuación de la Guardia Civil. Según el alcalde, los agentes acudieron al pueblo e identificaron a los presuntos agresores. El regidor ha apuntado que hay al menos dos detenidos y que la Benemérita está tratando de identificar a los dos que llevaban la cara cubierta.
«Tengo mucho miedo, son vecinos del pueblo, hace unos meses a uno de ellos se le denegó un permiso de obras en una vivienda y a otro un informe municipal», ha confesado el alcalde, que en las elecciones del pasado domingo revalidó la mayoría absoluta que consiguió por primera vez en 2019. «Espero que el juzgado les ponga una orden de alejamiento, no puedo seguir viviendo al lado de ellos, me quieren matar», ha manifestado Gallardo.
