La Policía encontró grabaciones de abusos sexuales de extrema dureza a los que sometía a su hija menor.
Un hombre detenido en el marco de la ‘Operación Magnesio’ ha sido condenado a siete años de cárcel después de reconocer que abusó sexualmente y grabó a su expareja. El acusado también abusó y filmó su hija menor de edad y una amiga de esta también menor, pero estos hechos se encuentran en fase de instrucción, según informa Canarias7.
La condena, según recoge el medio, se alcanzó de conformidad en el Juzgado de Violencia sobre la Mujer, pero se sigue investigando por el Juzgado de Instrucción número 2 de Las Palmas de Gran Canaria para el caso de las menores.
La Operación Magnesio es una macrooperación de rastreo que buscaba a usuarios de la red eDonkey que se descargaban pornografía infantil y ha sido liderada por el UDEV de la Policía Judicial.
Estos agendes descubrieron que el militar tenía archivos de grabaciones, entre ellos se encontró un material de abusos sexuales de extrema dureza a los que sometía a su hija menor.
Además también localizaron que el hombre tenía vídeos grabados con cámara oculta de su expareja durmiendo o en la ducha, así como de otra menor, amiga de su hija.
La hija del investigado, que por entonces tenía once años, declaró en su momento que su padre abusaba de ella de forma continuada. Después de estas declaraciones, él reconoció los hechos.
