
Si hay algo que cualquier consumidor valora es tener acceso a distintos medios de pago, como por ejemplo las tarjetas o las transferencias. Pero, aunque las generaciones más jóvenes se hayan adaptado muy rápido a gestionar los trámites del banco a través de aplicaciones, para los españoles también es fundamental contar con efectivo, o más bien, con un método con el cual
La mayoría de nuestra población está a favor de una sociedad que funcione con dinero en efectivo; y es que según un estudio impulsado por el Banco de España, esta forma de pago sigue siendo la favorita en nuestro país a la hora de abonar nuestras compras. ¿De dónde sacamos ese dinero en efectivo para ir pagando? Las estadísticas dicen que ocho de cada diez ciudadanos obtienen efectivo directamente desde los cajeros habilitados por las entidades bancarias.
¿Y por qué nos gusta disponer de nuestro dinero de forma tangible? Te contamos a continuación las razones por las que las monedas y billetes siguen ocupando un lugar privilegiado en nuestro bolsillo.
3 razones por las que los españoles aún preferimos el dinero físico
Hay tres grandes motivos por los que los españoles seguimos eligiendo el dinero en efectivo para hacer nuestros pagos:
- El pago en metálico de las transacciones económicas, en algunos casos, consigue impulsar el ahorro, pues muchas personas ahorran más si pueden ver físicamente (y no a través de una pantalla) cómo su montón de dinero va creciendo de forma paulatina. Sin embargo, este método tiene su contrapartida, pues el dinero en efectivo, con el tiempo, va perdiendo valor, mientras que permaneciendo en una cuenta de ahorro puede generar un porcentaje en contra de la inflación.
- Aunque los bancos son seguros y se trabaja a diario para perfeccionar y blindar todas las operaciones financieras, es cierto que otro motivo que esgrime la ciudadanía para aferrarse al dinero en efectivo es la seguridad. Muchos españoles, sobre todo de edad más avanzada, se sienten más seguros llevando una contabilidad física y conociendo en cualquier momento dónde está su dinero.
- Y por último, la tercera razón está en el control del presupuesto: nos resulta más fácil controlar el gasto con el dinero físico que con las tarjetas y otros medios virtuales, que, además, en algunos casos, suelen establecer comisiones.
Las dos caras de la moneda, ¿tiene algún inconveniente usar efectivo?
Ya hemos analizado algunas de las ventajas que llevan a los españoles a preferir el dinero físico. Pero ojo, el dinero en efectivo tiene algunas desventajas que debemos tener en cuenta; desde la desvalorización del dinero que ya apuntamos anteriormente, a las cuestiones relacionadas con la seguridad: no es fácil encontrarle un lugar 100% seguro ni siquiera en nuestro propio hogar y existe la posibilidad de olvidarlo en casa para una transacción importante y quedarnos sin nada.
Hay que subrayar que existe una tendencia generalizada a compaginar el uso de las tarjetas y el del dinero físico. Conviene no olvidar que la tarjeta también atesora interesantes beneficios: con ella puedes disponer de dinero en prácticamente en cualquier sitio que haya un cajero o una entidad bancaria, podrás realizar pagos con la tecnología contactless y prácticamente no ocupa espacio en tu cartera. Quizás no sea una cuestión de elegir, sino de saber cómo, cuándo y porqué complementar ambas opciones.
Efectivo y… ¿qué más?
Y aunque el efectivo sigue siendo una de nuestras preferencias a la hora de pagar nuestras compras, existen otras formas de pago alternativas al dinero físico. No es de extrañar que en una época tan fuertemente marcada por los avances tecnológicos, hayan aparecido nuevos métodos que hasta no hace mucho tiempo eran impensables. Todos ellos conforman los sistemas que utilizamos los españoles a diario. Vamos a profundizar en ellos:
Tarjetas
Debido a su comodidad, es el gran método alternativo al efectivo que usamos en España. Además, nos ofrece varias posibilidades: las tarjetas de prepago son muy seguras para las compras en Internet, ya que solo nos permiten gastar el dinero que se ha cargado previamente en ellas. Por su parte, las de crédito ofrecen la posibilidad de pagar las compras a plazos.
PayPal, Bizum y otros monederos digitales
Ya en 2021, PayPal era el segundo método de pago más usado en España para comercio electrónico. Tanto esta plataforma como otras similares ejercen de intermediarios entre el comprador y el comercio. Los datos bancarios del primero quedan registrados en ellas, pero nunca son conocidos por el segundo. Así quedan protegidos.
Actualmente, en 2023, es Bizum la plataforma que está despuntando a nivel comercial a la hora de efectuar los pagos. El dato es esclarecedor: más de 50.000 comercios en España se han asociado a este proveedor de pagos.
Wallets digitales
No son otra cosa que monederos digitales con los que se puede pagar a través del teléfono móvil. Su funcionamiento es sencillo. Basta descargar la aplicación, asociar las tarjetas a ella y aproximar el dispositivo al datáfono.
Transferencias bancarias y domiciliaciones
Son los medios de pago elegidos cuando se trata de cantidades importantes de dinero o de operaciones bancarias que se repiten periódicamente.
Con todo esto, ahora sabes cuáles son los métodos de pago más comunes en España, las ventajas que ofrece seguir usando dinero en efectivo y tus opciones para usarlo de una manera más cómoda y segura.
Podemos concluir que lo fundamental en el ámbito financiero es poder realizar nuestras transacciones convencionales e impulsar nuestros métodos de ahorro de una forma cómoda y segura. Afortunadamente, la realidad actual nos permite hibridar lo analógico y tangible con la tecnología punta digital. Complementar ambos sistemas se antoja imprescindible.