La decoración y el diseño son elementos dinámicos que se consideran un arte y que siempre cambian e incorporan nuevas tendencias. Cada día hay nuevas combinaciones de materiales, se descubren nuevas estéticas y se añaden nuevos componentes a los ambientes.
El microcemento es uno de estos novedosos materiales y se utiliza para crear atractivos acabados en todas las habitaciones de la casa.
Esta tendencia de vanguardia está ganando adeptos para instalarse en todos los ambientes de la casa. Desde la cocina a los baños, pasando por el salón o el comedor porque es extremadamente versátil, relativamente económico y ofrece acabados de primera para los más diversos gustos en lo que a decoración y diseño se refiere.
¿Qué es el microcemento y cómo funciona?
Además de ser una nueva tendencia de construcción y decoración, el microcemento es un material a base de cemento que puede mezclarse con diversos aditivos, como resinas y pigmentos y aplicarse a diversas superficies verticales y horizontales porque tiene excelente agarre a múltiples materiales que pueden ser su base.
Debido a su alta adherencia, puede utilizarse en casi cualquier sitio y aplicarse para decorar, reconstruir y reformar áreas sin tener que quitar, previamente, el material que existe en la superficie a remozar.
Es decir, se utiliza sobre baldosas, azulejos, pladur, hormigón, mármol, yeso y cualquier otro material con un espesor de unos 3 milímetros como mínimo.
¿Cuál es el mejor lugar para utilizar microcemento en Málaga?
Si se vive en Málaga y se quiere usar la técnica del microcemento, lo ideal es buscar una empresa responsable y con experiencia en aplicación y asesoramiento que ayude y contribuya a crear mejores acabados en la casa, empresa u oficina.
El microcemento en Málaga ofrece una gran cantidad de opciones ornamentales, decorativas y de reformas y puede usarse en las siguientes superficies:
1.- Suelos: como el microcemento no tiene juntas, crea suelos continuos que son un gran recurso para la decoración y el acabado de espacios que van desde la cocina a los baños y desde el salón a la terraza o patios.
Combina con una gran variedad de estilo y su enorme variedad, los colores y tonalidades permiten obtener geniales acabados y diseños. Desde los clásicos y sobrios a los audaces y dinámicos.
2.- Muros, fachadas y paredes: es muy sugerido para revestir fachadas y paredes al ser 100% lavable. Es resistente a los elementos climáticos y como es un material muy duradero, se puede decir adiós a la pintura por muchos años. Viene en miles de tonalidades para elegir y combinar el estilo de decoración deseado. Es muy recomendable para fachadas exteriores por su acabado y durabilidad.
3.- Baños: es estupendo para reformar los baños pasados de moda con azulejos viejos, ya que no requiere trabajos de albañilería complejos, ni la retirada de baldosas. En su lugar, se aplica una capa de microcemento sobre estas superficies y el entorno será totalmente nuevo.
4.- Escaleras: utilizar el microcemento en la construcción o renovación de escaleras es una gran idea. Su aspecto será exquisito si se combina con pasamanos de metal, madera o cristal.
Además, es muy resistente y duradero, por lo que puede soportar la constante actividad de los pies sobre los escalones.
5.- Cocinas: se utiliza para revestir y renovar suelos y paredes de azulejos anticuados en las cocinas, dándoles un aspecto actualizado y moderno.
El microcemento también se puede usar para construir o dar acabado a una cubeta de lavavajillas o un fregadero sin necesidad de utilizar acero inoxidable u otros metales. Y una encimera de microcemento es lavable y atractiva.
6.- Piscinas: el microcemento puede utilizarse para cubrir piscinas porque es un material muy duradero. Otra de sus ventajas es que es resistente a los rayos UV y a la humedad, Al ser antideslizante proporciona seguridad, sobre todo si hay niños en casa.
El microcemento se puede utilizar en decoraciones modernas, urbanas, clásicas, campestres porque sus colores y la combinación con muebles, lámparas, accesorios, alfombras y miles de elementos es infinita.
