El pez, cuyo valor en lonja habría superado los 2.000 euros, quedó varado en la arena, arrastrado por la corriente, aunque por su aspecto ya estaba muerto cuando llegó a la costa
La playa del arroyo de Totalán, en La Cala del Moral, es una de las playas habilitadas en el litoral malagueño para el baño con mascotas, así que es habitual encontrarse con algún perro correteando por la orilla. Pero lo que no es tan normal, de ahí lo noticioso del asunto, es toparse con un atún de 200 kilos varado en la orilla.
El extraño hallazgo se ha producido a primera hora de esta mañana. Una joven que precisamente estaba paseando con su perro se encontró con el enorme pez, de casi dos metros de longitud, y avisó a los servicios municipales. Operarios de Limasa acudieron a la playa y se las ingeniaron para transportarlo hasta el vertedero de los Ruices para incinerarlo según informa Diario Sur.
El atún, que por su aspecto ya estaba muerto cuando llegó a la orilla (no quedó varado accidentalmente en la arena, algo que ya ha ocurrido en otras ocasiones), pesa entre 190 y 200 kilos (por la forma y el tamaño de su mitad trasera, ya habría desovado).
El precio de una pieza completa (sin limpiar) está actualmente entre 10 y 11 euros en lonja (entre 22 y 25 euros en pescadería), por lo que el atún habría alcanzado, como mínimo, un valor de mercado, próximo a los 2.000 euros.
Dado que ha sido hallado muerto en la orilla, adonde ha sido arrastrado por la corriente, todo apunta a que habría sido pescado por furtivos, que fondean estas piezas para sacarlas desde las playas o a través de los puertos en horarios con menos vigilancia.
