El cadáver estaba en su coche y todo apunta a que se trata de un suicidio.
El cuerpo de un piloto de Ryanair fue hallado sin vida el pasado viernes 3 de agosto en el interior de su vehículo, estacionado en el aparcamiento de personal del aeropuerto de Málaga. Las primeras investigaciones apuntan a un suicidio, según publica el Diario El Mundo.
El piloto, de nombre Jouke Schrale, tenía 45 años y llevaba 10 trabajando en la aerolínea irlandesa. El día de su muerte debía capitanear un vuelo desde Málaga a Bruselas. El suceso ocurrió unos días antes de los paros del personal de cabina de la compañía low cost y una semana antes de la huelga de pilotos en Irlanda, Suecia, Bélgica y Alemania.
Según el diario inglés The Sun, fuentes de Ryanair aseguraron que en la compañía están «muy apenados» por la muerte de Schrale y que sus compañeros están en shock.
