El detenido es un peligroso delincuente que contaba con varias órdenes de búsca y captura, informa Cadena Ser
Agentes de la Policía Local de Málaga, en colaboración con agentes de la Policía Nacional, han detenido a un individuo con múltiples antecedentes, de nacionalidad checa y 42 años de edad, como presunto autor de los delitos de robo de uso de vehículo, contra la seguridad vial por conducir sin carné y desobediencia, atentado y resistencia a agentes de la autoridad, además de constarle en vigor una orden de búsqueda y detención, siendo el órgano reclamante un juzgado de instrucción de Torremolinos y el motivo la sustracción de otro vehículo.
Los hechos han tenido lugar sobre las 02:00 horas de la madrugada de este jueves 18 de julio, cuando la maniobra extraña que llevó a cabo el conductor de un monovolumen marca Citroen, modelo C8, en calle Atarazanas, llamó la atención de atentes de la Policía Local de Málaga que patrullaban por la zona en vehículo policial, por lo que decidieron pasar la matrícula a través de sus sistemas informáticos por si pudiese constarle algún señalamiento.
Vehículo sustraído
La perspicacia e intuición de los agentes dio sus frutos tras comprobar que al vehículo le constaba una denuncia por sustracción con fecha del pasado 10 de junio en la Comisaría Provincial de Castellón.
Desobediencia y atentado
Ante tal hecho, los agentes procedieron a darle el alto a la altura de plaza Arriola con Pasillo de Santa Isabel, para lo que activaron los sistemas acústicos y luminosos del vehículo policial, colocando el mismo delante para obstaculizarle la salida, apeándose uno de los policías locales e indicándole al conductor que parase el motor y se bajase del monovolumen, a lo que este, lejos de atender las indicaciones, aceleró embistiendo el coche patrulla, a la vez que se subía sobre la acera y arrancaba un semáforo por su base, dándose a la fuga y circulando a gran velocidad tanto por la acera como por la calzada, tratándose, además, de una zona usualmente muy transitada por viandantes, por lo que podría haber puesto en peligro la vida de los mismos.
Debido al impacto contra el semáforo, reventaron dos de los neumáticos del vehículo fugado, motivo por el que el individuo se apeó a la altura del número 50 de calle Carretería, continuando la huida a pie por calle Biedmas.
Vehículo recuperado
Del mismo modo, debido a la colisión sufrida por el coche patrulla, el paragolpes quedó descolgado entre las ruedas, por lo que los dos policías locales que componían la unidad emprendieron la persecución a pie, comprobando, a su llegada, que dentro del coche fugado había dos personas más, procediendo a controlar e identificar a las mismas, tratándose de un hombre nacido en Brasil de 36 años y una mujer nacida en Paraguay de 32, los cuales se mostraron colaboradores, estando ambos nerviosos y manifestando que no conocían de mucho al conductor, ni que el vehículo en el que circulaban hubiese sido sustraído, mostrando su predisposición a colaborar con los policías locales.
Vital colaboración de un joven opositor a policía
Los policías locales, junto con el resto de unidades de servicio, comenzaron a dar una batida por la zona con el fin de localizar al fugado, siendo fundamental la colaboración de un joven de tan solo 20 años de edad, tratándose además de un opositor a policía, que observó como el individuo huía hacia el descampado del río Gualdalmedina, no dudando en buscarlo hasta lograr localizarlo tras unos veinte minutos de búsqueda, concretamente entre el muro de contención y unos setos allí ubicados, donde al parecer había quedado encajado en su intento de huida, tras lo que dio aviso a las fuerzas policiales, permaneciendo en el lugar hasta su llegada.
