El trofeo llegó este mediodía a la estación María Zambrano de Málaga tras un viaje en AVE desde Atocha, Madrid
Este domingo al mediodía, la Copa del Rey llegó a la estación María Zambrano, a bordo de un AVE que partió por la mañana desde Atocha, Madrid. Siguiendo la estela de eventos deportivos anteriores, como la Copa Davis en noviembre. El trofeo permaneció expuesto en uno de los andenes de la estación ferroviaria mientras las autoridades atendieron a los medios de comunicación. Según publica Diario Sur.
Acompañando al trofeo, el personal de la ACB estuvo presente durante este breve acto, donde las autoridades, incluido el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, el concejal de Deportes, Borja Vivas, el diputado provincial, Juan Rosas, el secretario general para el Deporte de la Junta, José María Arrabal, y el presidente de la ACB, Antonio Martín, atendieron a los medios de comunicación.
Antonio Martín, presidente de la ACB, fue el primero en expresar su entusiasmo por los eventos venideros, destacando la hospitalidad de Málaga: «Quinta vez y nadie se cansa. Málaga es un sitio para acoger la Copa. La intención es que los aficionados lo pasen bien y que tengan ese experiencial de Copa, que lo convierte en un torneo único y distinto». Además, resaltó la importancia de la música y el entretenimiento que acompañarán al torneo que arrancará este domingo con el concierto de Lola Índigo: «Lo que queremos es que la ciudad empiece a vivir esto cuanto antes. Es lo mínimo que podemos hacer. Que lo viva la gente en la ciudad».
Posteriormente, el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, valoró lo que se viene: «Málaga es una ciudad muy acogedora, hospitalaria y amable. Los demás equipos van a tener una estancia inolvidable. Todos ganan compitiendo aquí en Málaga». Catalogó de «formidable» la situación del Unicaja.
Juan Rosas, en la misma línea que el alcalde de la capital, se mostró encantado con el aterrizaje de la competición en el Martín Carpena.
Menos escueto fue José María Arrabal, que otorgó un valor extra y único a este torneo. «Albergar un acontecimiento en esta tierra es sinónimo de éxito. No podemos caer en la autocomplacencia y pensar que es un torneo más. Es el objetivo que nos autoimpusimos con la ACB, que no sea una Copa más, que sea la mejor que se ha disputado hasta el momento. Que se convierta en un nuevo estándar para los eventos deportivos y entretenimiento».
En resumen, las expectativas y la emoción están en alza mientras Málaga se prepara para acoger la Copa del Rey, prometiendo una experiencia inolvidable tanto para los equipos participantes como para los aficionados.
