Algunos agentes habían empezado a hacerse pruebas serológicas mediante iniciativas privadas pagándolas de su bolsillo, informa Diario Sur.
La Dirección General de la Policía ha empezado a practicar test rápidos de coronavirus a toda la plantilla de la Policía Nacional de la provincia de Málaga, al igual que la Dirección General de la Guardia Civil a los efectivos de la Benemérita. Según informan desde las principales fuerzas sindicales del cuerpo nacional, se trata de análisis rápidos efectuados por el Sistema Andaluz de Salud, al igual que en el caso del Instituto Armado, y vienen a poner fin a una larga reivindicación por parte de los agentes de ambos cuerpos, que los solicitaron desde que comenzó la pandemia por su proximidad y contacto con los ciudadanos.
Según han informado desde Jupol este martes, los primeros test rápidos a la Policía Nacional se realizaron ayer, lunes, en Antequera. Le seguirán otras demarcaciones y comisarías, empezando por Ronda, Vélez-Málaga, Málaga y otros puntos. Desde este sindicato consideran la realización de los test como el resultado de «un gran trabajo» por parte de los representantes que han luchado por la implantación de esta medida de control.
Por parte de la Benemérita, desde la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) indican que los test empezarán a realizarse este martes, también en la zona de Antequera, y se irán desplazando hasta el resto de puestos principales de la provincia.
Tanto la Policía Nacional como la Guardia Civil, Fuerzas Armadas así como cuerpos municipales y vigilantes de seguridad –todas las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado dependientes del Ministerio del Interior– fueron calificadas por el Ministerio de Sanidad como funcionarios de baja exposición al virus, dejándolos fuera del conocido como ‘grupo de riesgo’. Esta determinación, que contradecía en función de las principales fuerzas sindicales cualquier consideración con la realidad a pie de calle que están viviendo los agentes y efectivos durante la cuarentena, fue recurrida y llevada a la Audiencia Nacional. Este órgano judicial revisó las consideraciones y reafirmó la postura de Sanidad, aunque flexibilizó las medidas de prevención para tratar de contentar a los profesionales, que ahora, en Málaga, reciben estos test rápidos con los brazos abiertos, aunque sea tarde.
