El mercado de coches es muy competitivo y siempre para tratar de destacar. En este sentido, han ido surgiendo modalidades con la idea de innovar y revolucionar el mercado, tal como está haciendo el renting, que sin ser precisamente una transacción de compraventa, sino más bien un alquiler por un tiempo prolongado, se ha convertido en la opción favorita de muchas personas para adquirir un vehículo.
Adquirir un coche puede convertirse en un proyecto difícil de cumplir, por los altos precios que tienen los vehículos y lo caro que sale mantenerlos. Ante esta realidad muchos optan por una extraordinaria alternativa que se está convirtiendo en la solución ideal para muchos: el renting.
Esta modalidad para obtener un coche ha ayudado a una gran cantidad de personas a tener un vehículo sin tener que pagar las costosas sumas de dinero que se requieren para adquirir uno nuevo.
El renting se ha popularizado tanto, que hoy en día se ha convertido en una manera común de adquirir un coche, que aunque no es propiamente una compraventa, quien lo alquila disfruta de él como si fuera su propietario, hasta que vence el correspondiente contrato.
El renting de coches incluso ya está especializado hasta en las marcas de vehículos para alquilar, es decir, hay empresas que por ejemplo, ofrecen solo renting de Ford, por ser estos coches de los mejores de la industria y estar entre los favoritos de los clientes.
Son compañías que ofrecen Ford Focus, Fiesta, Mondeo y demás modelos de la marca estadounidense, para gusto de los amantes de estos coches. Son vehículos de muy alta calidad, que tienen un público cautivo que siempre los buscan.
Las empresas de renting de coches Ford tienen en stock una amplia gama de vehículos con los modelos más recientes, siempre a disposición de sus clientes, para cuando los necesiten.
¿En qué consiste el renting de coches?
Esta novedosa manera de obtener un coche consiste en el alquiler de un vehículo por un determinado tiempo, que puede estar entre 12 y 60 meses, en el que la persona que lo alquila se compromete a pagar una cuota fija mensual al arrendatario para usarlo como propio.
Mientras el renting está vigente, el cliente no tiene que pagar de más, es decir, todos los gastos relacionados con mantenimiento, averías, fallos, impuestos, sustitución de neumáticos y hasta la Inspección Técnica del Vehículo (ITV), quedan por cuenta de la agencia arrendataria.
Los vehículos que se alquilan siempre son con la última tecnología y se encuentran en perfecto estado, muchos totalmente nuevos, que se colocan en renting para facilitarles a los clientes la posibilidad de tener un coche de agencia sin tener que comprarlo.
Incluso, hay modalidades que ofrecen la posibilidad al cliente de que, una vez concluido el tiempo del contrato de renting del vehículo, pueda comprarlo y quedarse con él, y los pagos efectuados se descuentan del importe acordado para la venta. Es como haber comprado un coche con financiación, habiendo pagado parte del mismo en cuotas.
Ventajas del renting de coches
El sistema de renting tiene sus indudables ventajas, por las que se ha popularizado tanto, entre las que destacan:
- Cuotas fijas mensuales: el cliente solo pagará mensualmente la cantidad establecida en el contrato y la empresa prestadora del servicio se encargará de todos los gastos relacionados con impuestos, mantenimiento, reparaciones, seguro y demás aspectos obligatorios que requiere un coche. Es un negocio muy conveniente para el cliente, quien no se tiene que preocupar por nada, solo de pagar la cuota fija asignada mensualmente para disfrutar del coche.
- Coche nuevo sin entrada ni cuotas iniciales: la mayoría de agencias de renting ofrecen coches nuevos para alquilar. El cliente puede disfrutar de un vehículo recién salido de fábrica, sin pagar más allá de la cuota mensual fija, una gran ventaja que muchos están aprovechando.
- Adiós a la depreciación: cuando se compra un coche nuevo, con solo sacarlo del concesionario ya pierde valor, y ni hablar cuando ya ha pasado cierto tiempo y los kilómetros avanzan. Con el renting no hay que estar pensando en ese problema, por cuanto se tratan de coches alquilados que se usan durante el tiempo pactado y luego se devuelven a la empresa que se encarga de asumir la depreciación del vehículo.
- Actualización de coche: es tan ventajosa esta modalidad que si al concluir el tiempo de alquiler el cliente quiere renovar el contrato pero con otro coche nuevo, puede hacerlo sin ningún problema y sin pagar comisiones ni pagos adicionales, solo continúa con el contrato pero con otro vehículo.
- Ahorro de tiempo: al presentarse alguna avería o si se deben hacer los mantenimientos programados, así como cambiar los neumáticos, el cliente no tiene que perder su tiempo movilizándose para ir a los talleres y concesionarios con el fin de hacer esos trabajos, por cuanto la empresa se encarga de realizar todos los trámites y gestiones. Y en el caso de que el vehículo tuviera que quedarse más tiempo del esperado, se asigna otro provisionalmente, mientras se repara el suyo.
Modalidades de renting
Hay una diversidad de tipos de renting que varían según el tiempo de alquiler, respecto a quien alquila (particular, empresa, autónomo), el uso que se le vaya a dar al coche y las condiciones especiales que puedan acordar empresa y cliente.
El renting para particulares suele ser más flexible, por cuanto el uso que se le da a los coches es más familiar, mientras que para empresas y autónomos cambian un poco las condiciones, ya que los vehículos son sometidos a severas situaciones de trabajo.
Las principales modalidades de renting son las siguientes:
- Tradicional: el cliente paga una mensualidad fija y la empresa corre con todos los gastos del coche. Esta es la que aplica especialmente para particulares.
- Renting flexible: el pago no es fijo, varía dependiendo del kilometraje recorrido, la cantidad de vehículos (puede ser una flota) y el periodo en que se utilizará el vehículo.
- Renting back: la empresa prestadora del servicio adquiere los vehículos de la compañía que la contrató y se los alquila, haciéndose cargo de todos los gastos de mantenimiento.
Fleet Management: no es propiamente un renting, pero es considerado una modalidad. Aplica cuando la empresa cliente tiene su flota de vehículos pero paga a otra para que se encargue de su mantenimiento.
