El proyecto que busca entregar una «solución ecológica» para orinar en público ha desatado controversia por su cercanía a la catedral de Notre Dame y por estar a la vista de barcos que pasean por el río Sena.
El diseñador del Uritrottoir -una combinación de las palabras en francés para urinario y para pavimento- dijo que ofrece una «solución ecológica para orinar en público».
Se trata esencialmente de una caja con una abertura al frente y una jardinera en la parte de arriba, que contiene paja que se transforma en compost para su uso en parques y jardines.
Sin embargo, habitantes de Ile Saint-Louis dijeron que el receptáculo, que no cuenta con caseta de tipo alguno, podría estropear un barrio ultraelegante.
«Es horrible», dijo el dueño de 50 años de una galería de arte cercana, que no quiso que se mencionara su nombre. «Nos han dicho que aceptemos esto, pero es absolutamente inaceptable. Es destruir el legado de la isla. ¿La gente no puede comportarse?», agregó.