Torrox volverá a superar este verano la cifra de medio centenar de denuncias a los bañistas por reservar sitio en la playa, según todas las previsiones.
El pasado lunes ya superaban las 40, por lo que todo parece indicar que se podría aumentar la cifra total del pasado verano, cuando se alcanzaron las 52 una vez finalizado el mes de septiembre.
Torrox se convirtió en 2014 en el primer municipio malagueño que aprobaba una ordenanza de playas en la que se contemplaba sancionar las reservas de espacios en la primera franja del litoral durante los meses del verano. Desde entonces, no sólo se aprobó la normativa, sino que además se dispone de un servicio que actúa con diligencia y contundencia ante las críticas principalmente de algunos foráneos, pero el aplauso de la mayoría de los residentes.
En 2015 se interpusieron 26 multas y se retiraron unos 100 enseres playeros y el pasado verano la cifra de sanciones se duplicó hasta las 52.
La ordenanza contempla una tasa de 30 euros por recuperar las pertenencias que han sido dejadas deliberadamente a primera hora de la mañana o a mediodía para reservar espacios en la primera línea de playa y una multa de hasta 300 euros que solo se tramita en casos extremos.
