Vélez-Málaga vive su último día de feria con gran tristeza y siendo centro de atención de los medios de comunicación
De las 90 personas atendidas finalmente por la deflagración de gas en un comercio de Vélez-Málaga ayer en plena feria de día de la Real Feria de San Miguel, solo seis continúan hoy ingresadas en el hospital según han confirmado fuente oficiales a AxarquiaPlus. La capital de la comarca de la Axarquía vive esta jornada de domingo su último día de feria con gran consternación y siendo centro de atención de medios de comunicación nacionales e incluso internacionales.
Entre las seis personas que continúan ingresadas, se encuentra la cocinera del establecimiento que dio la voz de alarma evitando una auténtica tragedia. La mujer permanece estable en la UCI del Hospital Comarcal de la Axarquía con policontusiones.
También permanecen en el hospital comarcal, otras cuatro personas, una de ellas, un joven que tuvo que ser intervenido en el brazo y de heridas y cortes en la espalda, aunque estos están ya en planta, según las fuentes consultadas.
La sexta víctima se encuentra en el Regional de Málaga capital, a donde llegaron a ser trasladadas dos personas; un adulto por un problema auditivo y un niño para su valoración por el servicio de cirugía plástica, aunque esta redacción no ha podido confirmar cuál de los dos permanece ingresada.
En el pasaje Montera, uno de los principales centros de la feria de día de Vélez-Málaga, y donde se produjo el suceso, era todo silencio y consternación esta mañana. Numerosos medios de comunicación recogían en directo las últimas novedades de lo acontecido, mientras los trabajadores del establecimiento se afanaban, algunos entre lágrimas, en adecentar la zona lo mejor posible.
Mientras unos viandantes pasaban de largo sin ni siquiera querer volver la vista, otros más curiosos fotografiaban el local; una cocina de apoyo al establecimiento, que ha quedado totalmente destruido.
También presentes miembros de la Policía Científica de la Policía Nacional, que ha abierto una investigación para aclarar el origen de la deflagración.
A escasos metros, la caseta Gloria Bendita, de la Cofradía de Las Angustías, en un ambiente muy distinto a lo que es habitual en ella, sobre todo en el último día de feria. Sus componentes vivieron muy de cerca todo lo acontecido, no sólo por la proximidad a los hechos, sino además porque fue el lugar elegido por el 061 para instalar el hospital de campaña donde se atendieron inicialmente a los heridos.
Las primeras investigaciones, que corren a cargo de la Policía Nacional, apuntan a una fuga de gas, originada por causas desconocidas, como origen de la deflagración.
La voz de alerta de la cocinera no consiguió que el numeroso público que allí se encontraba, entre ellos, el concejal del PA, Marcelino Méndez-Trelles, se alejara de la terraza suficientemente. De los primeros en llegar, dos agentes de la Policía Local, que se acercaron rápidamente, y que también resultaron con heridas, aunque se encuentran entre los que ya han sido dados de alta.
La onda expansiva también ocasionó la rotura de numerosos cristales en las viviendas del bloque superior y daños en otras fachadas cercanas, entre ellas la de la sede del Partido Popular, que está justo enfrente del bar.
Hasta el lugar se desplazaron media docena de ambulancias del 061, de la Cruz Roja y del Distrito Sanitario; se personaron numerosos efectivos de Policía Nacional, Local, Guardia Civil y Protección Civil, además de los Tedax de la Policía Nacional.
Muchos de los heridos llegaron al hospital o a los centros de salud por sus propios medios, lo que hizo que resultara difícil concretar hasta última hora el número final de personas atendidas.
