Afirman que «mientras que somos el segundo pueblo de toda la Axarquía que más le debe a los bancos, los proveedores locales no cobran»
El PSOE de Benamocarra ha criticado la política económica del Ayuntamiento de la localidad tras la celebración días pasados del Pleno Municipal en el que se debatieron, entre otros asuntos, la liquidación del Presupuesto Municipal del pasado año 2016 y la parte correspondiente al presente año 2017, y en el que votaron en contra.
Para los socialistas, el gasto en sueldos del equipo de Gobierno «sigue siendo escandaloso para un pueblo como el nuestro, de 3.000 habitantes. Los vecinos y vecinas de Benamocarra nos gastamos anualmente en los sueldos de nuestro alcalde y concejales un total de 130.864,02 € brutos.
Añaden que «el gasto de personal sigue siendo sonrojante superando con creces el millón de euros anuales, en total y para ser exactos de 1.121.523,25 €, lo que supone el 40% del Presupuesto anual a gastos de personal».
La deuda del Ayuntamiento de Benamocarra sólo a bancos, afirman, «asciende a 2.955.000 €, es decir, somos el segundo pueblo de toda la comarca de la Axarquía que más dinero le debe a los bancos. Los habitantes de Benamocarra debemos cada uno 985 €, lo que supone el décimo pueblo de toda la provincia de Málaga que más dinero le debe a los bancos, de un total de 103 pueblos malagueños».
Por contra, señalan en un comunicado, «Nuestros comerciantes locales siguen esperando a que el Ayuntamiento decida darles alguna ‘limosna’ de las grandes ‘trampas’ que tiene con ellos para poder sobrevivir y que sus negocios consigan salir adelante sin el grave problema de que tengan que cerrar sus puertas.
Para los pequeños comercios del pueblo supone un grave problema que el Ayuntamiento mantenga con ellos deudas bastante elevadas, ya que los pequeños autónomos locales no se pueden permitir ese lujo».
Desde el Grupo Municipal Socialista, continúa el comunicado, «nos solidarizamos totalmente con ellos y nos comprometemos a ejercer toda la presión que podamos para que les paguen todo lo que se les debe, porque entre otras cosas, sentimos vergüenza ajena por este hecho».
