Un amplio dispositivo policial esperaba en la playa del núcleo de Vélez-Málaga el desembarco de la droga desde una lancha
Madrugada del pasado martes. Un amplio dispositivo policial espera oculto el desembarco de hachís desde una lancha motora. La UDYCO de la Policía Nacional de Málaga, el EDOA de la Guardia Civil y el servicio de Vigilancia Aduanera –DAVA– venían colaborando en una operación de seguimiento a los componentes de una banda, que iban a desembarcar droga en la playa veleña en el día y hora señalada.
Las informaciones de los agentes fue correcta. Los narcos trataron de darse a la fuga tras el desembarco. No hubo heridos, pese a que una furgoneta de los supuestos traficantes arremetió contra un vehículo de la Guardia Civil para sortear el cerco, según informa Diario Sur. Pero a pesar del intento de huida, pudieron ser arrestados. La droga desembarcada ha alcanzado los 2.300 kilos.
En las investigaciones posteriores se han efectuado más de una decena de registros domiciliarios relacionados con esta operación. También se han requisado vehículos, dinero y armas de fuego.
En total, once personas, entre ellas dos guardias civiles destinados en el cuartel de Salobreña (Granada), han resultado detenidas.
Los arrestos se han repartido entre Málaga (5) y Granada (6). El titular del Juzgado número 4, en funciones de guardia este miércoles, decretó el ingreso en prisión de todos los detenidos, a los que inicialmente se investiga por un presunto delito contra la salud pública, según fuentes judiciales.
El papel que las fuentes consultadas por Diario Sur atribuyen a los agentes sería, supuestamente, el de vender información a la banda de narcos, que sabía en todo momento los cuadrantes con los turnos de las patrullas del cuartel.
