El Vélez ganó con contundencia, lo hizo gustándose en algunos momentos, y además acabando el partido sin sufrir, ya tocaba. El Martos fue un juguete en mano de un Vélez mandón, creativo, encorajinado y esta vez efectivo. Siempre es complicado ganar dos partidos en casa de forma consecutiva, lo ha hecho el Vélez que le hace irse a los 19 puntos, ahuyentar fantasmas con los de abajo, y situarse cómodamente en la Liga. 
Y jugadores medio tocados, como Nacho o Vergara, tuvieron brillo, acompañados del resto del equipo, pero el primero que iba a dar en el blanco fue Ebwelle. «Ebu» para sus compañeros, clavó un remate en el ángulo izquierdo de Nauzet con un remate desde fuera del área. Se adelantaba el Vélez que estaba siempre con el balón, con un Martos acobardado, desconocido y poco valiente. Nacho estaba en todos los sitios, gustándose en algunos momentos, Vergara pegado a la banda no conectaba en los primeros minutos, pero Pepe siempre comparece y lo hizo con un remate a la cruzeta. Antes, Ebwelle de nuevo irrumpió de forma vertical y estuvo cerca de hacer el segundo.
En el segundo tiempo, ni el Martos dio un paso hacia adelante, ni el Vélez se arrugó y no le dio el balón. Pero claro, había que hacer el segundo, y ante la desesperación de Tello, que no entendió, ni nosotros, muchas decisiones arbitrales, no terminaba de llegar el segundo. Diego y sobre todo Vergara con todo a su favor para fusilar a Nauzet, no terminaban de enterrar la angustia. Incluso Ebwelle, haciendo una acción personal, se topaba con el poste y el portero marteño, el mejor de su equipo.
La gente en la grada esperaba el segundo para no sufrir un domingo más, y ese llegó en un balón sin dueño que cazó Joselinho, fue entrar y marcar. Claro 2-0, no está sentenciado los partidos, ¿a que no?. Y es que el Vélez sabe lo que es quedarse con cara de tonto con esa ventaja de dos goles, y que le remonten, pero claro para ello tiene que estar enfrente un equipo con ambición y ese no fue el Martos. Ignacio Anaya y Diego, jugaron con la cabeza al «futvoley», siendo el veterano ariete el que hacía el tercero.
Ahora el Vélez espera prolongar su racha en Atarfe, allí buscará dejar por cuarta semana seguida su puerta a cero, y si puede hacer, marcar y sumar tres puntos más.
