Podría abrir el 26 de mayo con un aforo máximo de 150 personas y de 255 desde el 25 junio, cuando comenzaría a recibir turistas de otras provincias, según Diario SUR.
La Cueva de Nerja ya está trabajando en su posible reapertura a partir del próximo 26 de mayo, en la denominada fase dos del desescalamiento, cuando comenzarían a funcionar los equipamientos culturales, como museos, teatros y cines, siempre y cuando la provincia cumpla con los criterios sanitarios que marque el Gobierno central.
En todo caso, y a la espera de que se concreten los detalles, desde la Fundación que gestiona el principal monumento natural de la provincia, se han anticipado y han adquirido una cámara térmica de infrarrojos, que se instalará en la entrada para medir la temperatura corporal de los visitantes. Con ella se pretenden detectar posibles casos de infección por coronavirus.
En cuanto al aforo máximo, durante un mes la cavidad no podrá recibir más de 150 personas a la vez durante las horas que permanezca abierta, lo que supone un un tercio de lo habitual antes de la pandemia del coronavirus. Posteriormente, y coincidiendo con la ampliación de la movilidad a otras provincias, a partir del 25 de junio serían 255 personas, lo que supone la mitad del aforo normal, según ha explicado a SUR el gerente de la gruta, Chema Domínguez. En el monumento natural se dispondrán además medidas higiénicas para todos los visitantes y trabajadores, como hidrogeles y desinfectantes, además de mascarillas y la distancia de seguridad para evitar contagios.
Ante esta «nueva realidad», el responsable del monumento ha manifestado que «toca reinvertarse» desde el punto de vista promocional y a la hora de organizar las visitas. «Entrarían en grupos de unidades familiares, con intervalos cada diez minutos, y vamos a señalizar las distancias durante el recorrido de 800 metros de las galerías turísticas, que se hará sólo con audioguías», ha detallado Domínguez, quien ha apuntado que están trabajando para captar visitantes de la provincia durante el primer mes de reapertura y posteriormente el turismo nacional principalmente, debido al cierre del espacio aéreo. «Vamos a ofrecer unos paquetes de visitas muy atractivos, con la idea de que los que vengan lo hagan para disfrutar de una experiencia totalmente segura, con posibilidad de comer en la terraza del restaurante, y visitar después el Museo y el centro de Nerja», ha concretado el gerente.
Así, están en conversaciones con el Ayuntamiento para ofrecer aparcamiento gratuito durante la primera hora en el ‘párking’ municipal situado junto al Balcón de Europa, al tiempo que retomarán la actividad del Cuevatren turístico, «pero respetando las distancias de seguridad», ha matizado. «La gente puede estar totalmente tranquila, vamos a ser un monumento Covid-19 ‘free’«, ha sostenido el gerente de la cavidad. Para poner en marcha estas medidas, se ha creado una comisión de crisis, con representantes de la Subdelegación, el Ayuntamiento, la Diputación y la Junta, en la que se consensúan los cambios.
Respecto al Festival Internacional de Música y Danza, que este año celebraría su 61.º edición, el gerente no ha podido concretar si finalmente se llevará a cabo. «Hasta que no lo acordemos no hay nada cerrado», ha apuntado, sin descartar que se pueda cambiar la fecha prevista inicialmente, en el mes de julio, o recortarse, organizando un número más reducido de actuaciones, con un aforo limitado a 800 personas, en el recinto exterior. No en vano, el pasado año ya se anunció que este evento no volvería a tener lugar en el interior de la gruta, que está declarada como un Bien de Interés Cultural (BIC), por motivos de conservación, para contribuir al objetivo de su declaración como Patrimonio Mundial de la Unesco.
